Está claro que todo mercado busca innovación, renovación, novedad, aunque no siempre es posible conseguirlo. Primero empezaron a hacer aparición modelos básicos destinados a actividades deportivas, que siempre han tenido su demanda de forma sostenida, sin muchas diferencias ni cambios en el diseño y operatividad de los modelos.
Hace ya unos años intentaron introducir en nuestro sector un amplio abanico de posibilidades, botellas de todo tipo, como artículo de referencia. Era una tendencia que venía primordialmente de influencias del mercado americano, que aterrizo en Europa a través de un mayorista/importador que hoy en día ya no existe, pues fue absorbido por otro grupo fabricante. La propuesta no triunfó en ese momento.
Pero, desde ya hace casi dos años empezaron a ponerse de moda las botellas de una forma importante, diría que exponencial, dando lugar hoy en día a una multiplicación de diferentes soluciones, materiales, usos y tendencias.
Aparte de plásticos básicos, hoy en día son de uso corriente los libres de BPA (para que no den ningún tipo de sabor al agua o líquido que se ponga en el interior) o tritan, que les dan consistencia y durabilidad.
También hay innumerables opciones en cristal o vidrio, cristal borosilicato, ya que es muy resistente a roturas, al igual opciones de perfil plástico hay modelos para aportar la opción de infusionar el líquido, ya sea con frutas o también para hacer tus infusiones en caliente principalmente en modelos de cristal.
El valor máximo añadido se ha aportado creando opciones de botellas de metal de dos paredes, en las que se ofrecen diferentes tipos de aislamiento. El nivel superior, podríamos decir, aporta aislante de cobre al vacío con recubrimiento de cerámica da un servicio increíble al usuario, manteniendo la bebida fría 24 horas y la caliente 8 horas, todo un servicio para los más exigentes, a un precio muy muy competitivo, aqui podeís ver diferentes opciones, de cristal y de metal. Las ventas de botellas seguirán creciendo sin parar.
Otro detalle de interés es la capacidad de comunicación, ya que no solo damos la solución de la sed como tal, según acabados del producto también transmitimos diferentes filosofías o formas de hacer, como tapones de plástico, metal, bambú, de diferentes formas, protectores de silicona, EVA o neopreno y todo tipo de colores a nuestra disposición…. a todo esto, le podemos añadir las posibilidades de personalización que puede ser, en dependencia del material de la botella, en láser, tampografía, digital a todo color o en serigrafia circular, técnica que permite imprimir prácticamente en toda la superficie exterior de la botella, impresionante.
Sin duda, estamos delante de un tipo de producto que ha venido a quedarse. No es una moda pasajera, es una solución completa porque en nuestro mercado uno de los valores añadidos más perseguidos de los artículos promocionales es poder conseguir que él usuario tenga cerca el artículo, que conviva con el de forma habitual y la botella tiene esta facultad.